¿Cuál es la forma más rápida de identificar a las personas más inteligentes en un grupo? Comience con una pregunta fácil, luego una más compleja.

Digamos que está en una llamada de Zoom con su equipo de marketing. Necesita ideas sobre cómo gastar los últimos $5,000 no asignados del presupuesto de su campaña. Hay muchas direcciones diferentes que puede seguir, entonces, ¿en qué ideas confía? Shailesh Panthee, un médico en Nepal, sugiere que abrir con una pregunta fácil y directa es una forma rápida de revelar quién está ansioso, tal vez demasiado ansioso, por demostrar su valía.

Por ejemplo, podría decir: “Recuérdame de nuevo, ¿qué significa CTR?” (CTR significa porcentaje de clics, el porcentaje de personas que hacen clic en un elemento después de verlo. La mayoría de las personas en marketing conocen el término). Y luego se sientan y escuchan. ¿Quién está soltando la respuesta?

Los que responden demasiado ansiosos a menudo están tan desesperados por los ‘puntos a favor’ que olvidan considerar si su contribución es verdaderamente valiosa. Y se saltan la verificación y el análisis de los hechos para ir directamente a la victoria.

Hay otra razón por la cual las personas inteligentes pueden dudar en responder preguntas obvias: sospechan que es una trampa. No soy un genio, pero basta con haber levantado la mano en una que otra clase del colegio para preguntarse si hay algo oculto detrás de una pregunta ‘demasiado sencilla’. ¿Verdad?

Si se encuentra al otro lado de esta ecuación, liderando esa llamada de Zoom, eso es exactamente lo que deberías estar haciendo. Con el ruido despejado, ahora puede descartar la pregunta real, más compleja y probablemente más creativa: “¿Cómo deberíamos gastar nuestro presupuesto de marketing restante?” Lo más probable es que el muy entusiasta de José y Ana, la buscadora de validación, contengan la respiración. Se contentarán con la aprobación que obtuvieron al responder la simple pregunta o, francamente, quedarán perplejos.

El proceso de atraer a las personas más inteligentes de la sala no será tan sencillo. Es posible que deba avisar a las personas llamándolas por su nombre. Pueden responder con otra pregunta, como “¿Cuál es nuestro objetivo principal al gastar el dinero?” O revisarán sus notas; probablemente hayan estado reflexionando en silencio durante un tiempo. Pueden ser un poco vacilantes. Entienden que nunca hay una sola respuesta final, y no tienen vergüenza de pedir a otros que mejoren su pensamiento. Eventualmente, sin embargo, sugerirán una idea.

Si usted es un líder que quiere saber quién en su equipo es un innovador solucionador de problemas, que sabe cómo pensar en lugar de simplemente qué pensar, este es el momento que está tratando de alcanzar.

Las personas inteligentes saben que escuchar es más valioso que hablar y que ninguno de los dos supera pensar por sí mismo. Tratan de evitar repetir lo obvio para poder gastar su tiempo y energía en lo que requiere análisis y creatividad.

Estar demasiado ansioso nos abre a errores y errores descuidados. El pensamiento reservado y estructurado no siempre se destacará, pero siempre vale la pena elogiarlos.